- Gestión de la Comunicación interna y externa (individual y grupalmente).
- Organización de la documentación.
- Hábito de lecturas actualizadas.
- Banco de pruebas de ideas. Feedback de públicos diversos. Ejercicio de la Didacticidad.
- Divulgación científica no mediatizada. Contacto directo con los lectores.
- Nuevos campos para la publicación. Los círculos académicos son de difícil acceso y limitada distribución.
- Construcción de una identidad como autores.
- Transparencia de los procesos científicos. Valor añadido de los descartes.
- Contextualización de información existente en la red.
- Nuevas redes sociales y entornos de relación. Transciende barreras espacio-temporales (departamento, congresos, etc.)
Una propuesta de Amardeep Singh consiste en la promoción particular y envío de posts a revisores de la blogosfera académica o de la universidad no bloguera. La revisión se puede hacer como un tipo peculiar de comentario, sin necesidad de entrar en conversación con el autor, con un digg o menéame académico, también puede tomar forma de wiki, fijando las entradas positivamente evaluadas como nodos ordenados en secciones disciplinares o similar.
La discusión, también con John Holbo, sigue en los comentarios a The Valve:
Idea for Discussion: An Academic Blog Review
La evaluación en la academia puede ser más complicada de lo que parece. Sólo situarse en el mundo de los blogs académicos ya destapa las diferencias culturales y de criterio. Y entiendo que otros colegas no quieran figurar en listas o wikis, antes que acabar como otros blogs que hablan de los medios.
Asunto: los intentos de catalogar el sector no se libran de errores académicos, que pueden llegar a seculares, como los bellos pero falsos árboles de la ciencia.
En el portal (wiki) de blogs académicos, montado por humanistas, se propone como ámbitos del saber: humanidades, ciencias, profesiones y ciencias sociales.
Viene a decir que ciencia-ciencia son las humanidades y que también dejan ser (por antiguas supongo) a las naturales. Es sorprendente el ámbito de las profesiones y artes útiles (arquitectura y tecnologías con vecinos de los medios, de la enseñanza o del derecho) y en las ciencias sociales (quedan las hijas menores de la filosofía y la humanidades como la sociología, psicología y otras consolidadas en el siglo pasado).
Ya se ve la necesidad de algún catalogador/a revolucionario/a que le dé una patada a la CDU o los códigos UNESCO en los que no cabe lo actual, lo interesante, lo demandado por alumnos y profesionales...
Siguiendo con lo que decía antes del recorte presupuestario a las "carreras inútiles" podríamos seguir el criterio contrario al Academic Wiki pro encumbrar a esos "menos científicos" que no conseguir colocar a sus egresados en el mercado laboral.
Dudo se me entienda. Ni siquiera en las viejas ciencias, como la filosofía, se justifica un discurso personalista, puro de tecnología y de impacto social. El discurso intelectual tiene más sentido en blog que en otros soportes por su impureza, por mancharse las manos con lo que es una oportunidad y un riesgo del presente, que seguro que nos pasará alguna factura de futuro. La academia aislada del mundo, con rígidos formalismos y formulismos, los sentidos obsoletos de universidad, no importa que no accedan al blogging. Para el resto de universitarios, el blog enlaza el discurso científico, con el profesional y con los problemas y retos diarios para buscar respuestas y sentidos.
Es muy difícil que el discurso bloguero del académico sea tan personal que se aisle de sus referencias, de los debates y de las comunidades. Esto también diferencia el blogging académico de los ensayos y monografías solipsistas, del "alto reconocimiento global", de los artículos de pago que enriquecen equipos editoriales, del mundo de la baja lectura y la cita por reverencia o colegueo, y de la aún más oscura ciencia industrial que se publica para favorecer patentes y leyes en directo beneficio a industrias determinadas.
En mi campo, si el periodismo científico y el periodismo educativo dejan de cumplir sus funciones de evaluación, investigación y vigilancia es más que lógico que pidamos que otro/a, quiza bloggers, que ocupen voluntariamente esos lugares, hasta donde les llega la vista y el criterio. Esa blogosfera no es inmune, ni impagable, pero algo aportará para sacarnos del error moderno de pensar que la ciencia orbita alrededor de la industria de la ediciones acreditadas y autoevaluadas como científicas.
6 comentarios:
Muy interesante la reflexión. Se te entiende muy bien. Para quienes quieren entender, claro.
Un saludo. Tíscar.
gracias, Tíscar
Una pregunta: ¿por qué tiene un nuevo medio de expresión como es el blog que ajustarse a las formas de interpretación y valoración del establishment y no al revés o simplemente que el establishment (académico, se entiende) acepte un sistema totalmente diferente de publicación personal científica como un blog en términos nuevos?
¿por qué siempre reinterpretamos los nuevos conceptos para que sean espejos de lo que ya existe? (por ejemplo la novedad era Wikipedia, no Citizendium...que no deja ser el resultado de la pataleta de los autoproclamados expertos en una materia...la idea de Citizendium no es nueva, Wikipedia sí) Lo que propone A. Singh es interesante pero peligroso, como lo es la publicación académica en papel, ¿quién se autoproclama como reviewer?, ¿cómo evitar criterios subjetivos o valoraciones realizadas por otros criterios?, ¿cómo evitar que el éxito de tu blog académico dependa de la voluntad de que X reviewer, convertido en 'knowledge broker', te revise o no el post? ¿por qué tendría que haber revisión en un blog? Entiendo que la política editorial de un 'journal' proteja la calidad-ventas de su publicación con un sistema previo de peer-revision, que eso es lo que realmente es. Un sistema que ajusta tu paper a lo que se espera en el journal, para que siga teniendo lectores. Sin embargo, un post en un blog ya está publicado y la calidad o la vida del mismo (una vez el autor haya podido/sabido difundirlo en la web por su habilidad de posicionamiento y difusión o pq un 'knowledge broker' le haya incluido en su blogroll) dependerá de los lectores, de sus suscripciones y comentarios -en los que ya puede haber indicaciones a revisión o mejora del post-. No sé si me explico y pido disculpas por la longitud del comentario, pero no deja de preocuparme que en el 2.0 y más empiecen a filtrarse los tics de siempre. ¿No sería más fácil luchar porque los blogs tengan un ISBN o la iniciativa IBSN? Esto ya serviría en los cvs. Francamente me resisto a que la blogosfera sea un espejo de la dictadura y necesidad urgente en la que se ha convertido la publicación académica hoy en día. Sería un error, que quizás lamentemos más adelante. 1000 disculpas de nuevo.
Mil gracias Elena. Estamos de acuerdo en que nadie quiere trasladar ni los criterios editoriales ni lo de evaluación científica al blog. La iniciativa ISBN es inviable por que no hay personas ni criterios que puedan trasladarlo a criterios contables comparativos sin pararse en un cenagoso análisis de contenido (quizá en la web semántica...). Sin embargo la evaluación y el reconocimiento científico se demanda y se da por supuesto, como tu haces, en la actividad del blogger. Esto no tiene porqué quedar al criterio subjetivo personal. Estando conectados, podemos, y debemos, contar con instrumentos de reconocimiento que más que las personas o los blogs, reconozcan, las ideas y su expresión en determinados posts. Facilitaría el sentido informativo y formativo que algunos intentamos dar a la Red. Gracias por tus palabras.
Hola
Pero es una iniciativa -la del ISBN digo- sí viable en otros países (Holanda,UK...) Supongo que imposible imposible no es, por tanto. Y si no se puede aceptar ésa en España, pq entonces no la de IBSN (Internet Blog Serial Number)?
***
Hay servicios como el www.reviewme.com, pero habría que ve cómo ajustar eso a un entorno meramente académico.
***
Saludos. Elena
ok, tanto el personal número del IBSN como el Reviewme son fórmulas en la dirección correcta. Aunque mirando el tiempo institucional al que se mueven y su dependencia del/a ministro/a de educación de turno cada cuatro años, no me parece que debamos esperar a que estas instituciones den el respaldo al sistema. Hasta ahora no he visto en los partidos ni en las instituciones cesiones voluntarias de poder (suele traducirse en dinero). Lo cual ni quita ni pone valor auténticamente académico a lo tratado en blog. En principio, lo hace menos sospechoso de algunos vicios conocidos.
Gracias de nuevo
Publicar un comentario